Por: Juan Alemany (*)
La comunidad internacional se demoró en tomar las decisiones que deberían haber sido tomadas hace quince días. Naciones Unidas retardó la decisión, porque temía el veto de Rusia y de China, quienes no comprendían bien lo qué sucedía. No lo comprendían bien, porque ellos habían realizado operaciones similares a las de Gadafi en el pasado.
Mucha gente habla en estos momentos de la independencia de los países para buscar sus propios destinos, pero se olvidan de que existe una carta de los Derechos del Hombre, firmado por casi todos los países del mundo, donde se comprometen a respetar la integridad del ser humano. (Seguro que en los años de las dictaduras de Latinoamérica, con los bárbaros como Pinochet y Videla y tantos símiles, también existían esos documentos firmados para defender los derechos humanos, pero la comunidad internacional no intervino).
Es que los tiempos cambian. Creo que se ha tomado conciencia a nivel internacional de como se puede y debe vivir con un nuevo concepto de humanidad; antes que pertenecer a cualquier país del mundo, somos seres humanos, todos los habitantes de la tierra, vivimos bajo el mismo sol y la misma luna, aunque hablemos otras lenguas y seamos de distinto color de piel. Entonces, tenemos derecho a defender la vida en cualquier parte del planeta, cuando un loco trata de hacer o realizar una limpieza social, por ejemplo.
Esto está por encima de las identidades nacionalistas de cada país en particular. El mundo, que con ayuda de internet se vuelve internacional, ha cambiado las interrelaciones humanas. Ahora un hombre en Argentina puede defender a otro agredido en Irán. Así como hemos levantado nuestras voces por los asesinatos de mujeres que son condenadas a la lapidación. La solidaridad humana es para con todos los hombres del mundo, sin importar los credos o las religiones: los seres humanos se están volviendo sensatos, y están poniendo la vida de los individuos por encima de la vida y la moral de los Estados.
Se está volviendo más importante el ser humano, a los Estados. Es una especie de internacionalización humanitaria que vive el mundo, independientemente del capitalismo y el comunismo, de las religiones y el materialismo.
Los hombres necesitan defenderse unos a otros de los sistemas opresores que les impide vivir dignamente. No olvidemos que todo esto es misterio. La vida, el amor y la muerte, son un misterio. Los hombres quieren vivir el misterio.
Las generaciones del siglo pasado, atadas a esquemas y moralismos alienantes, deben tener en cuenta que el hombre del futuro ya no será como ellos deseaban o creían. El hombre del futuro será un hombre en cambio, en completo movimiento y solidario con los demás. Una nueva idea de la justicia recorre el mundo, los hombres valoran más que las creencias, la fe, y los dogmatismos, que el mundo sea más justo. No se sabe muy bien hacia dónde va el ser humano, pero eso no lo sabe nadie. Lo nuevo y es lo que entendemos, es que los hombres y mujeres estamos en el mismo barco, vivimos por un tiempo la vida juntos, y luego desaparecemos. Entonces, debemos vivir felices, y ser solidarios unos con otros. Los dictadores de cualquier nacimiento o religión deberían estar preocupados por este nuevo fenómeno. Los seres humanos desean ser libres y, al parecer, nada los detendrá.
Ojalá que mis sueños no sean solo deseos y se vuelvan proféticos.
PD: Una vez escrito este artículo, la acción militar en Libia ya había comenzado. Mucha gente se percató de que eran demasiados misiles; etc. Horas más tarde habló el líder del Partido Socialista Español, Zapatero, y solicitó él mismo la autorización al parlamento español, para intervenir militarmente contra las fuerzas de Gadafi. La posición del PS Español, es un poco la posición de una gran parte de la izquierda socialista de américa latina, que ya no quiere más fanáticos gobernando el mundo, sumiendo los pueblos en la miseria y en la pobreza. Personalmente, mi pensamiento, sin estar determinado por ninguna ideología, está mas cerca de Zapatero, simplemente por ser una persona sensata.
J.A.
NR La gente escribe Kadafhi, Gadafhi, de 200 maneras diferentes. Esto puede degenerar en una personalidad múltiple, como su nombre lo indica.
(*) Escritor uruguayo, radicado en colombia. Cursó estudios de Literatura en Francia, en Paris VIII, con el el maestro Saúl Yourkievich. Ha escrito cuentos cortos,poesía y ensayos, y ahora publica su primera novela. Paloma roja es una novela policia, dentro del género negro, y la convierte en una nueva forma de filosofar, e interactuar entre los personajes, para cuestionar el tiempo.( Ver Link https://palomaroja.wordpress.com/novela-roja-capitulo-primero)
